Creo que es una de las películas más freekies, raras e interesantes que he visto últimamente. Fiona, una mujer desaliñada, entra en el hotel que trabaja Dom y se presenta como un hada que le va a conceder tres deseos. Dom es su alma mater en hombre y los dos se enamorarán. Entre carreras, escapadas de policía y psiquiátrico la pareja vivirá feliz los deseos que pide Dom sin que haya un tercero. Es una película con pocos diálogos y los pocos que hay son de besugo pero la comunicación se transmite a través de expresiones corporales, sonidos e imágenes para presentarnos una película atípica con altas dosis de humor y ternura.
martes, 3 de febrero de 2015
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